07 septiembre, 2009

Eres un ángel pero yo no quiero ir al cielo

Si mañana, de la nada, nos alejáramos por la misma fuerza que nos tiene hoy en contacto.

Si te cansaras de mi voz, yo de tus labios. Si alguien a quien ames se cruza en tu camino, si alguien que me amara me arrinconara a favor del viento.

Si viene el asteroide y nos borrara de golpe, si nos liberaran de esta banalidad, de estos cuerpos cada día mas desgastados. ¿Me recordarías? ¿me querrías? ¿qué conservarías al final del día? cuando la luna canta versos de terciopelo, cuando tu estás tan lejos pero en algún pastizal alterno nos quedamos dormidos viendo las múltiples estelas surcar los nublados cielos.

Si el fin llegara mañana, elegiría estar contigo.

Si mi cuerpo ha de ser sepultado, si la onda explosiva me tiene que carbonizar, calcinar mis huesos y toda prueba de que he existido, si todo eso debe suceder, que suceda mientras rozo tu espalda con mi mano, alegre ejercicio, necesario y preciso como respirar.

Que pasen las noches, que pasen los días, que pase todo lo que es mundano y ajeno a mis ojos.

Estoy confortablemente insensible, preparado para recibir los golpes furiosos de la tierra y sus habitantes.

Que me escupan en la cara y me hieran hasta que me desangre, por que junto a ti me siento invencible.

Es que si un día ya no estoy, que ese día llegará por fuerza de la naturaleza, si por casualidad dejo de respirar no dejes que la tristeza te sobrecoja en los fríos atardeceres color naranja a las afueras de la ciudad; lo más hermoso en la vida son esos pequeños absolutos, imperceptibles pero inmanentes.

Porque tú ya eres un ángel, pero yo no quiero ir al cielo sin ti….