Alborotadas disculpas se entrelazan
en un incoherente espanto de dolor
mientras la paciencia incontrolada
se impregna en el aspirar de mi conciencia...
Es bueno
saber
que sirves de algo
a pesar
de que aquello a lo que sirves
rompe tu ser.
Es bueno
darte cuenta,
a tiempo,
e inclinarse en venia
favorecida
cual maître ingles.
Es bueno
entender
que pasas tu tiempo
intentando lo imposible.
...y apelo a ella,
pues solo el tiempo me dará la razón!
Mientras tanto, por favor,
no dudes en servirte.